martes, 18 de diciembre de 2007

Para que regresen, para que se queden conmigo

He vuelto, y no tengo historias chidas destinadas a disculpar mi ausencia. Y eso está mal. Mal, mal, mal. Porque el internet, además de la pornografía, subsiste gracias a la incesante cantidad de mentiras que se puede uno crear.

Ahora bien, el año está próximo a concluir, por lo que es una época propicia para el cambio. He contemplado dos nuevas secciones; en realidad nunca han existido secciones, pero desde este preciso momento las habrá. Las inauguro, con listón, tijeras y fiesta llena de gente intelectual. Porque, claro, la magnitud del evento lo amerita.



Una danza similar efectuaron los distinguidísimos invitados, después del vino de honor (el chupe chelero). No sabría valorar el nivel de intoxicación etílica en la que se hallaban.

Las dos nuevas secciones son: "Mi pequeño gran diario ilustrado" y "Habla, que Mielina te escucha (y ocasionalmente contesta)".

Recibo como siempre, de todo cerebro-corazón, sus atinados y amigables comentarios (si no son amigables, no los quiero).